Crear una marca exitosa es algo muy difícil. Prestigiar un nombre y un estilo de servicio, de forma tal que la simple mención de nuestra marca genere respeto y confianza, ciertamente es la aspiración de todo emprendedor.

Si tú deseas disfrutar de los beneficios de tal nivel de posicionamiento, tienes dos opciones, ambas igualmente valiosas: construir tu propia marca o bien, adquirir una franquicia.

Muchos se deciden por la segunda opción, ya que así se ahorran el duro trabajo de empezar desde abajo posicionando una marca nueva. Con su contrato adquieren el derecho de usar una marca prestigiada y reciben el ‘know-how’ del negocio. Pero eso no quiere decir, en lo absoluto, que ser franquiciatario sea un día de campo. Representa un trabajo tan esforzado como tener tu marca propia.

Mitos y más mitos…

• Sólo es para grandes inversionistas. Si bien es cierto que adquirir una franquicia nunca será tan accesible como rentar un localito y ponerse a vender antojitos mexicanos, no todas las marcas disponibles en franquicias requieren de inversiones millonarias. Hay franquicias desde 50 mil pesos, aunque, claro, no son las marcas más famosas. Mientras más posicionamiento, más costo, pero también, más ganancias. (franquiciadirecta.com.mx)

• El éxito está garantizado.  Nada está garantizado en la vida, y en los negocios, mucho menos. Lo que ofrece la franquicia son más probabilidades de éxito, a partir de la experiencia obtenida por el franquiciante y los procedimientos ya probados. Pero el franquiciante no puede hacer que el franquicitario cumpla con todos los consejos, trabaje con disciplina y sea buen administrador.

• Si es franquicia, es bueno. Definitivamente no. No por el hecho de encontrar una marca franquiciada debemos confiar ciegamente. Es necesario analizar a fondo toda la oferta, la experiencia documentada, la bondad del producto y su aceptación en nuestra región. Aunque existen en México controles estrictos para permitirle a una marca ser franquicia, existen giros demasiado nuevos que pudieran no darte las mismas ventajas de una marca más difundida.

• Todo está resuelto. Un franquicitario como debe ser te ofrecerá su expertise sin cortapisas, sin guardarse nada, pero siempre habrá nuevos retos que abordar y es por eso que la comunicación con el franquiciatario debe ser continua. La información que recibes al contratar siempre será perfectible y deberás mantenerte actualizado en nuevos procedimientos, ingredientes, mejoras tecnológicas, costos y demás.

• Eres tu propio jefe. Falso. Cuando te vuelves franquiciatario, lo que haces es adquirir una serie de compromisos muy serios con la marca. Estarás obligado a respetar procedimientos, estilos de administración, horarios de trabajo, ofertas, promociones y todo lo que se dicte desde el corporativo. No hay espacio para la creatividad ni para la innovación, a menos que alguna de tus propuestas fuera aprobada por los franquiciantes. Si no cumples con las reglas, se te retira la franquicia.  Si este tipo de restricciones son un problema para ti, no te conviene adquirir una franquicia.

Grandes ventajas

Si se tiene clara la realidad del negocio franquiciado, sin expectativas equivocadas, se pueden aprovechar sus grandes ventajas.

• Menor incertidumbre, gracias al prestigio de la marca y la seguridad de procedimientos probados.
• Asistencia y soporte de parte del franquiciante.
•  Zona de exclusividad.
•  Publicidad y marketing diseñado y operado por el franquiciante.
•  Sistemas administrativos ya establecidos.
• Pertenencia a una red de franquiciatarios que comparte experiencias.
• Actualización permanente mediante seminarios y cursos.

Antes de adquirir una franquicia, planifica tu inversión, determina qué giro de negocio te resulta más atractivo y no escojas solamente en función del costo. Ten presente que es un compromiso a largo plazo y que la recuperación de tu inversión tomará un buen tiempo, de acuerdo a la marca que hayas elegido. Infórmate sobre las posibilidades de éxito de diversas marcas y haz un profundo análisis para ver si esta opción de negocio es realmente para ti.